En el proceso de erosión hídrica los escurrimientos de agua arrastran sedimentos, partículas, que son depositadas aguas abajo en las profundidades de los arroyos y los ríos que forman parte de las cuencas hidrográficas.
Producto de ello, la pérdida de suelo fértil, disminución de rendimiento de los cultivos y posiblemente una de las mayores contaminaciones del ambiente.